lunes, 6 de octubre de 2014

Cualquier tiempo pasado fue mejor

Leía yo hace un par de semanas los resultados de un estudio que indicaban lo que todos ya imaginábamos: cualquier tiempo pasado fue mejor.

Es decir, el factor nostalgia.

Según dicho estudio (que no recuerdo ni quién lo hizo, ni dónde lo leí, ni na de na) el período que transcurre entre los 14 y los 21 años de una persona es en el que se forjan los gustos y aficiones de las personas humanas, es decir, lo que te guste cuando seas adolescente será lo que te guste cuando seas adulto. Es más, aunque más adelante te gusten las cosas que se parecían a aquellas que veías, leías o escuchabas en dicha época, ninguna será tan buena como entonces.

Por eso, para mi la mejor época de Britney Spears es la primera, no hay mejor anime que Dragon Ball, la mejor película de Batman es La Máscara del Fantasma, y los mejores cómics son el Dark Knight Returns, Watchmen y la JLA de Morrison (leído todo entre los 17 y los 20 años). Sigo escuchando con pasión las bandas sonoras de Dragon Ball (descubierta a los 14), Mortal Kombat y Power Rangers (ídem), las de los juegos de Sonic (a los 18) y a Avril Lavigne (a los 19). Mi escritor favorito es Terry Pratchett (leído por primera vez a los 14) y para mi la mejor etapa de Hulk es la de Peter David. El Spider-Man que me gusta era el que estaba casado, y los videojuegos de Sonic, los de Dreamcast. El Minecraft de las narices no tiene nada que hacer contra el Monkey Island, y las películas de Star Wars que...

Bueno, tal vez no cualquier tiempo pasado fue mejor. Siempre y cuando cuando el futuro no traiga de nuevo a Jar Jar Binks.

¿Tusa comprende?

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