Tengo un iPad
Pues sí, pese a todo lo que hablé mal del iPhone 4 (sobre todo cuando le dí la patada y lo cambié por un fantabuloso Nokia Lumia 920), he acabado comprándome un iPad. Para entender por qué, tal vez habría que remontarse al pasado lejano. Concretamente, aquí, y también aquí.
¿Ya os he refrescado la memoria? Con lo poco que actualizo ahora, tampoco es que haya muchas entradas entre medias, pero bueno, por si las moscas.
Para empezar, un par de notas sobre el mercado digital en estos años, que explican por qué hemos llegado a engrosar las arcas de Apple, otra vez:
- Amazon compró Comixology en 2014, haciendo que gastarse ahí el dinero diera mayor sensación de seguridad, más después de que pasara lo de Panini.
- No recuerdo cuándo, Comixology creó una página para Europa, lo que hizo que los precios subieran (los que compren videojuegos saben cómo las compañías pasan de los tipos de cambio, cuando son beneficiosos para el consumidor), e impidiendo pagar en la página americana con tarjetas europeas.
- No todo iba a ser malo, se levantó la restricción contra Las Tortugas Ninja. Ahora mismo puedes comprar reediciones de los cómics antiguos (Mirage y Archie), y cómics nuevos (tanto los de adultos, como la adaptación de la nueva serie de Nickelodeon)
- Para todo lo que no es Marvel o DC, Comixology permite la posibilidad de descargarse los cómics en Pdf o Cbz. Sí, el formato piratilla que nació para descargarse cómics de forma alegal es usado de forma legal, y no sólo por Comixology.
- En 2014 nació Panel Syndicate, una "editorial" que publicaba la genial The Private Eye por el estupendo precio de LO QUE TE DE LA GANA PAGAR (de 0 a infinito), pudiendo elegir idioma (castellano, catalán o inglés) y formato (PDF, CBR o CBZ). Lo que diferencia esta iniciativa de otras similares es que no trabaja con autores amateur, sino con profesionales con años de trayectoria, y más que contrastada calidad. Aun habiendo terminado The Private Eye, la editorial publica actualmente Universo! y Barrier.
- Hablando de Universo!, aunque no sea santo de mi devoción, es justo mencionar Orgullo y Satisfacción, la revista mensual de los que se fueron de El Jueves, que siguen un modelo de distribución similar a Panel Syndicate (aunque poniendo su precio de salida en 1,50€)
El caso es que, después de varios meses, con este panorama (y las ofertas de Comixology, de las que ya hablé aquí, aquí, aquí o, aquí, por ejemplo), los 16GBs de mi Kindle Fire HD se me quedaron pequeños (y después del Next Men, la pantalla de 7 pulgadas, también). Probé suerte con una tablet Android marca Nisu con memoria ampliable mediante tarjeta MicroSD y pantalla retina (lo que viene siendo un iPad de palo) pero me encontré con un problema: la aplicación de Comixology sólo permite descargar (y leer) los cómics almacenados en la memoria principal del dispositivo. Su servicio de atención al cliente funciona muy bien, pero la respuesta que me dieron a mi problema no me dejó nada satisfecho: bajarme sólo los cómics que fuera a leer en el día, e ir borrando cuando terminara para bajar otros. La solución puede pareceros buena hoy, en 2016, cuando casi todos tendréis fibra óptica, pero los que no la tenemos, no podemos ir bajando día sí día también, yo quería una solución que me permitiera descargar mi biblioteca en local.
Llegamos a las navidades de 2013-2014, y una conjunción de astros (y un Black Friday) me hizo comprar una Microsoft Surface 2 con Windows 8 RT, una tablet de gran capacidad de memoria interna (64GB), ampliable por MicroSD (para todo lo que no fuera Comixology) y una pantalla más que decente de 10 pulgadas y pico. El problema llegó ante la poca acogida que tuvo el sistema operativo: Amazon no dedicó esfuerzos en una app que casi nadie iba a usar, y que nunca estuvo actualizada. Era necesario estar conectado a internet para leer un cómic, y finalmente la app fue descontinuada en otoño de 2015 (eso sí, me regalaron $5 como compensación), e imposible de utilizar desde enero de este año. Tocaba buscar sustituta.
Estuve dándole vueltas, muchas, pero al final la elección estaba entre dos: una Amazon Kindle Fire HDX de 8.9 pulgadas y 64GB de memoria interna (recordemos que Comixology ahora es de Amazon, en ninguna otra tablet va a ir mejor), o un iPad Air 2 de 128GB (y sí, mi biblioteca digital ocupa aún más). Una de las razones por las que tardé tanto en decidirme fue por esperar a que Amazon o Apple presentara una tablet nueva en 2015 (ambos modelos, aunque competentes, son de 2014). Seguramente, si Amazon hubiera sacado una tablet de 128Gb hubiera caído (pero no, prefirieron sacar a la venta una tablet de gama de entrada por 60 euros). Este año seguro que aparece un iPad Air 3, pero no estoy seguro de que lleguen a los 256GB de memoria (y reconozcámoslo, acabaría llenándolos igual), así que vi una oferta en eBay, y no me lo pensé.
Por ahora estoy muy contento, tengo una biblioteca muy grande sin ocupar espacio, y mis compras en papel las reservo para cómics que realmente merecen la pena (Dragon Ball Color, One Punch Man, la JLA de Morrison...), tomos que realmente me gusta ver en la estantería.
¿Y sabéis qué? Al final me hice con el Batman 400 en digital ^^
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