Máscaras
Mañana es 31 de Octubre, fecha en la que tradicionalmente, en los países anglosajones, se ha celebrado Halloween, una fiesta asociada a las máscaras y las criaturas de la noche.
Batman Vuelve (Batman Returns, Tim Burton, 1992) no es una película sobre Halloween. De hecho, es una película navideña, pero es una película que trata muy bien las máscaras y los monstruos, tanto los nocturnos como los diurnos.
Con todo lo fan que soy del trabajo de los hermanos Nolan tanto en Batman Begins como en The Dark Knight (y lo soy mucho, de verdad), hay una escena que en ninguna de las dos películas se ha podido superar, una escena que refleja como ninguna la dualidad Bruce Wayne/Batman. Pero antes de ir a ella, pongámonos en antecedentes.
Con todo lo fan que soy del trabajo de los hermanos Nolan tanto en Batman Begins como en The Dark Knight (y lo soy mucho, de verdad), hay una escena que en ninguna de las dos películas se ha podido superar, una escena que refleja como ninguna la dualidad Bruce Wayne/Batman. Pero antes de ir a ella, pongámonos en antecedentes.
En esta película Batman se enfrenta al Pingüino (personaje que, tras el tratamiento que dio aquí Tim Burton, nunca volvió a ser el mismo) y a Catwoman. En una pelea con esta última por los tejados de Gotham City, se colocan bajo una rama de muérdago.
Batman: Muérdago... El muérdago puede ser mortal si lo comes.
Catwoman: Pero un beso puede ser más mortal si te lo propones.
Sólo por estas dos líneas deberían haberle dado a esta película el Oscar a mejor guión adaptado, pero la cosa aún se pone mejor. Bruce Wayne (Batman) asiste a un baile de máscaras organizado por Max Shreck, pretendido filántropo y el verdadero monstruo de la película. Allí Bruce se encuentra con Selina Kyle (Catwoman), la secretaria de Max, a la que éste intentó matar al principio de la película, por lo cual ella quiere meterle un tiro.
Lo bonito de esta escena es que, en una sala de gente disfrazada, ellos dos son los únicos que no llevan máscara... al menos no una que se vea a simple vista, pues las máscaras de sus respectivos disfraces son sus verdaderos rostros, ocultos en este baile a los demás. Y en un momento de la escena...
Selina: Un beso bajo el muérdago... El muérdago puede ser mortal si lo comes.
Bruce: Pero un beso puede ser más mortal... si te lo propones.
Momento mirada, comprensión. Finalmente la secretaria y el filántropo se quitan las máscaras el uno frente al otro y ven a la gata y el murciélago que hay debajo. "¿Tenemos que ponernos a pelear aquí mismo?". Mejor vedlo por vosotros mismos.
Acompaña perfectamente a la escena la canción Face to Face de Siouxie and the Banshees. Toda la banda sonora, obra de Danny Elfman acompaña de forma magistral a la película (y es delicioso escucharla al mismo tiempo que se lee el The Dark Knight Returns de Miller, de verdad, probadlo), pero esta canción es el broche de oro a una escena brillante. Infinitamente mejor que el momento Prince de la película anterior.
Mientras decidís cuál es la máscara que lleváis puesta, y ante quién decidís quitárosla, os dejo con la versión completa de Face to Face. Que la disfrutéis.
2 comentarios:
Debo reconocer que el ritmo de esta película me pareció excesivamente lento.
Me quedo sobre todo con la canción de Siouxsie and the Banshees mucho mejor que el cargante de Prince. Supongo que será cuestión de gustos, máxime cuando el que suscribe es devoto seguidor de la reina del Post-punk desde hace eones.
Parece que han quitado el vídeo de Youtube con la escena que enlacé. Os dejo un link al mismo vídeo que, por petición del autor no se puede insertar, pero sí referenciar.
Esta es la escena:
http://www.youtube.com/watch?v=eeEz9oE17ac&hd=1
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