Inquietudes juveniles: La experimentación
Es muy normal, cuando se es joven, el querer experimentar. Es parte de nuestra personalidad, de nuestra impaciencia. Quererlo todo, querer comprenderlo todo, querer saber cómo funciona todo, querer probarlo todo.
Ya desde una temprana edad, tenemos la inquietud de probar nuevos sabores, oler nuevos olores, oír nuevos sonidos...
Con la edad, las inquietudes varían, pero no nuestra sed de saber más y más. Leemos cosas distintas, vemos cosas distintas... Incluso llegamos a escuchar estilos musicales completamente distintos.
Cuando llegamos a cierta edad empezamos a tener inquietudes distintas: sexuales, políticas, profesionales... decidimos que queremos probar qué vamos a ser el resto de nuestra vida, y cualquier modo es bueno, incluso probando en un juego simulador.
Así que resumiendo. En nombre de toda la humanidad: Cris, dedícate a la Economía, que la Medicina no es lo tuyo.
Ya desde una temprana edad, tenemos la inquietud de probar nuevos sabores, oler nuevos olores, oír nuevos sonidos...
Con la edad, las inquietudes varían, pero no nuestra sed de saber más y más. Leemos cosas distintas, vemos cosas distintas... Incluso llegamos a escuchar estilos musicales completamente distintos.
Cuando llegamos a cierta edad empezamos a tener inquietudes distintas: sexuales, políticas, profesionales... decidimos que queremos probar qué vamos a ser el resto de nuestra vida, y cualquier modo es bueno, incluso probando en un juego simulador.
Así que resumiendo. En nombre de toda la humanidad: Cris, dedícate a la Economía, que la Medicina no es lo tuyo.
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